miércoles, 30 de mayo de 2012

Sr. Ministro de E y M: “No hay atraso en el precio del GLP”

El precio del GLP es y seguirá siendo noticia en el Perú y en todas partes del mundo. Por ello la importancia que tiene la noticia publicada por RPP el 29-05-12 cuyo titular es “Balón de GLP podría subir hasta en S/.6 desde agosto”. Nuevamente, con abuso del tiempo potencial del verbo poder, se trata de poner un parche antes que brote el chupo de la irrealidad; pero esto, como ya he comentado anteriormente, es sumamente peligroso por el efecto especulativo que lleva implícito. De ahí a que en otros medios rebote la noticia y se vaya distorsionando como es clásico en nuestro territorio, hay un solo paso”. Es aquí donde debe prevalecer la palabra de nuestros políticos y entendidos.

Esta vez RPP señala que “según Gonzalo Tamayo, socio director de Macroconsult, descongelamiento de banda de precios hará que costo gas de uso doméstico sea de S/. 36, en promedio[1]. Una tremenda confusión pues una cosa son las bandas de precios, en efecto congeladas y otra el precio realmente cobrado por las refinerías y productores de GLP. Con una caída en el precio internacional del GLP que ya lleva 53 semanas, bien se pueden descongelar las bandas que se ubican entre 1.77 y 1.83 PEN/Kg para envasadoras pues el PPE (Precio de Paridad de Exportación es esta semana de 1.80 PEN/Kg con tendencia a seguir cayendo. Y esto no significará incremento de precios pues ya estamos pagando precio internacional. Todos los comentarios internacionales apuntan a que la baja es lo más probable que suceda en el caso del precio del GLP, habida cuenta de una menor severidad del frío en el hemisferio norte, la importante influencia de la abundante y más barata oferta de gas natural “shale gas” con precios a la baja y altos inventarios en los países exportadores.

Añade la nota de RPP que según Gonzalo Tamayo, socio director de Macroconsult “… El precio promedio de un balón está alrededor de 30 soles, pueden haber marcas más caras y más baratas pero eso nos daría una idea de regresar al orden de 36 soles”. Esto no es correcto. Según INEI el precio promedio en Lima/Callao durante el mes de abril 2012 de un balón de 10 Kgs de GLP ha sido de 35.28 PEN, nivel que estoy seguro se mantendrá más o menos invariable al cierre del mes de mayo. Si el GLP subiera de precio un 20%, supuesto negado, se ubicaría más bien en un promedio de 42.34 PEN.
Sin embargo debo destacar que lo más preocupante es que sea el propio Ministro de Energía y Minas el que manifieste, según RPP, que “Efectivamente hay un retraso del precio pero poco a poco vamos a ir sincerándolo”. Esto no es correcto. Desde hoy martes 29 el GLP no recibe subsidio en ninguno de sus destinatarios, de acuerdo con la propia información de la Dirección general de Hidrocarburos del MEM, por lo que no existe ningún retraso del precio sino que por el contrario, más bien el GLP que se vende para el destino granel ha empezado a aportar (sobre precio) al Fondo de Estabilización de Precios con 0.06 PEN/Kg. Una desinformación completa y preocupante.






[1] http://www.rpp.com.pe/2012-05-29-balon-de-glp-podria-subir-hasta-en-s-6-desde-agosto-noticia_487065.html


lunes, 28 de mayo de 2012

¡Aproveche! Gas Natural masificado

Este 20-05-2012 Proinversión publicó una convocatoria a concurso público internacional en la modalidad de proyectos integrales para otorgar en concesión el proyecto llamado “Masificación del uso de Gas Natural a Nivel Nacional”. Se señala que los concesionarios recibirán las concesiones bajo concurso por 20 años más la etapa de construcción de la red de distribución de un máximo de 30 meses, debiendo financiar, construir, operar y mantener los sistemas de transporte y distribución de gas natural al servicio de las ciudades de Abancay, Arequipa, Ayacucho, Cajamarca, Chiclayo, Chimbote, Cusco, Huancavelica, Huancayo, Huaraz, Juliaca, Lambayeque, La Oroya, Moquegua, Puno, Quillabamba, Tacna, Tarma y Trujillo. Se agrega que los adjudicatarios cubrirán sus costos de inversión, operación y mantenimiento con las tarifas que se establecerán en los Contratos.

Hasta aquí se trataría de la gran noticia, una noticia que arrancaría aplausos de los habitantes de nuestras ciudades supuestamente favorecidas. Y con ello se siembra peligrosamente una esperanza.

Veamos sin embargo un par de detalles que no le hacen nada bien al sistema y que denotan presiones, apuros y en fin nada concreto.

Primero; se anuncia este concurso 26 días calendario antes de que se publiquen las bases; es decir no se tiene nada que ofrecer, sólo la intención de buscar la noticia a como dé lugar. Y claro, esto lo consiguen fácilmente.

Segundo; en ninguna parte se dice de donde provendrá el gas natural que los concursantes tendrán que transportar. Tampoco los volúmenes que estarán disponibles ni desde cuándo. Sin embargo se señala que “Se exigirá que los adjudicatarios se comprometan a realizar el transporte del LNG o GNC[1] hasta el límite de las ciudades establecidas (City Gate), para la regasificación y distribución por ductos del gas natural”.

¿Se imaginan lo costosa que resultará esta operación toda ella basada en gasoductos virtuales para el transporte terrestre en camiones por nuestras carreteras? Doy por sentado que Proinversión ya calculó el costo económico de echar a andar la masificación y sería bueno conocerlo. Por otro lado se señala que “algunos de estos costos podrían ser financiados utilizando los fondos provenientes de la aplicación de la Ley N° 29852, Ley que crea el Sistema de Seguridad Energética en Hidrocarburos y el Fondo de Inclusión Social Energético”. Esperemos a ver cuáles serán estos costos, cuáles serán las ciudades subsidiadas y cuanto el monto al que ascenderán estos subsidios. Mientras tanto va la apuesta sobre cuantas postergaciones sufrirá esta convocatoria.





[1] LNG es la sigla de Gas Natural Licuado y GNC la sigla de Gas Natural Comprimido. Señalar este compromiso para los adjudicatarios implica que deberán abastecerse de una Planta y transportar el gas natural ya sea licuado o comprimido mediante camiones. Igualmente LNG sólo está disponible en las instalaciones para exportación de Peru LNG en Pampa Melchorita

domingo, 27 de mayo de 2012

Publicidad explosiva

La página A5 de la edición del diario El Comercio correspondiente al lunes 21-05-12 nos trae a full color un aviso publicitario de página completa suscrito por Nitratos del Perú bajo el lema “Estamos listos para realizar una gran inversión”.

Soy Economista, pero no dejo de tener una gran afición por la evaluación de las campañas de marketing de todo tipo. Por ello no deja de moverme al comentario una publicidad como la antes señalada, indicando lo que a mi modesto entender suelen ser errores de dirección de campañas como los que creo se están cometiendo en este caso.

En realidad, si se ha decidido gastar en publicidad, de lo que se debería tratar es de aplicar marketing social para generar empatías con el proyecto y no utilizar argumentos publicitarios tan anticuados que de viejos ya caen en burdos. Delicado manejo mediático en un escenario en el que, para colmo, el gerente general de la firma dio un “ultimátum” a Pluspetrol por gas para su proyecto, según el diario La República del 27-04-12 [1], indicando que esperarán hasta julio para que se les entregue el gas o de lo contrario se marcharán a otro país “donde las reglas si funcionen”. Así las cosas, al parecer la prioritaria y recomendable negociación ganar – ganar no camina y por ello el acudir a avisos del tipo que comentamos parece un gasto inútil.

Nitratos del Perú S.A., según su página Web, fue fundada el 27-10-2008 y será, como señalan “la primera empresa petroquímica peruana de escala mundial, que dará valor agregado al gas natural extraído de los yacimientos de Camisea”. El proyecto contempla la construcción de dos plantas: una de Amoniaco (NH3) y otra de Nitrato de Amonio (NH4NO3), ambas con capacidad para abastecer la demanda peruana y exportar los excedentes. Más del 80% del amoníaco producido en las plantas químicas del mundo se utiliza para fabricar abonos y para su aplicación directa como abono. El 20% restante se utiliza en explosivos, plásticos, textiles, pulpa y papel, alimentos y bebidas, productos de limpieza, refrigerantes y otros. En el caso del Nitrato de Amonio a producir será del tipo para uso minero (explosivos) e industrial.

Los propietarios de Nitratos del Perú S.A. son el grupo empresarial peruano Brescia (el más rico del Perú) con el 51% y el grupo empresarial chileno Sigdo Koppers con el 49%; dos pesos pesados de los negocios latinoamericanos. Estos dos mismos grupos han comprado en conjunto y partes iguales 2/3 de la propiedad de IBQ Industrias Químicas (Britanite), que pertenece al grupo Almeida de Brasil y es la mayor firma brasileña de fabricación de explosivos, pagando cada uno 60 millones de USD [2].

Adelanto que no voy a profundizar en la evaluación económica del proyecto para centrarme en el aviso publicitario, que supongo es el inicio de una serie de otros más elaborados y seguro de mejores resultados.

En primer lugar, como en todo aviso, surge la pregunta de ¿a quién va dirigido?; No creo que a nadie con dos dedos de frente y experiencia, que de inmediato se puede hacer las mismas preguntas que yo me hago. Quizá se espere que algún funcionario público pueda sentirse conmovido porque no se pueda echar a andar el proyecto con la inversión que se anuncia está lista como señal de confianza en el Perú, según nos informan, pero que no tiene ningún poder de decisión para cambiar ni el sentido común ni la legislación ni tampoco para ordenar la negociación u obligar a tal o cual requerimiento, ni señalar a quien se atiende y a quien no con nuestro gas natural. Peor aún si piensan que su negociación con el operador de Camisea va a ser favorecida o aligerada con esta clase de campañas sino que todo lo contrario no garantizan relaciones armoniosas con quienes serán sus proveedores a lo largo del proyecto.

En segundo término, nos ponen como ejemplo a seguir, con una vistosa fotografía aérea nocturna, la Planta Petroquímica de Mejillones en Chile indicando que será “similar a la que será construida por Nitratos del Perú en Pisco”. La búsqueda en Internet nos muestra infinidad de artículos, videos y fotografías sobre contaminación ambiental en lo que fuera una hermosa Bahía chilena afectada ahora en el aire y fondo marino por la operación de la citada Planta. Si así será la de Pisco, menudo problema en el que nos están metiendo. Mejor promover la difusión del tratamiento ambiental y la consulta con la población una vez que ya ha sido aprobado su estudio de impacto.

En tercer término, nos indican “800 millones de dólares de confianza en el Perú”, mientras que en su Nota de Prensa del 24-01-11 declaran que “invertirá alrededor de 750 millones de dólares” y en su página Web (que debería tener la información más actualizada), se declara que ésta “contempla una inversión aproximada de US$650 millones”. Aunque ésta se está volviendo una mala costumbre en el Perú (caso por ejemplo de la modernización de la refinería Talara de Petroperú o del gasoducto sur andino), la campaña no debe esforzarse en pregonar cuanto mayor puede ser la inversión pues no es ese el criterio que finalmente importa cuando se trata de proyectos de este tipo. Incoherencia que genera incredulidad.

El cuarto error cometido tiene que ver con los recursos generados para el Estado peruano. Se señala en el aviso que son “por más de 120 millones de dólares al año”, mientras en la Web se declara “Esta inversión permitirá al Estado recaudar, durante la operación, ingresos superiores a los US$ 100 millones al año, por impuesto a la renta, regalías e IGV”. Nuevamente el gigantismo monetario que distorsiona las cifras y crea desconfianza. Además no sabemos cómo surge el cálculo de regalías pues igual se tendrán que pagar ya sea que el gas natural se utilice para la generación eléctrica, para el servicio domiciliario o para el transporte vehicular o para producir amoniaco.

Una cuestión importante de destacar y que aparece en la Web de la empresa en comentario es que indican “El Proyecto asegurará la independencia de nuestro país de las grandes transnacionales sustituyendo el 100% de las importaciones de nitrato de amonio por producción local” (el subrayado es mío). Esperemos que esto no se coloque en otro gran aviso pues no suena armónico cuando el socio del proyecto es Sigdo Koppers, un conglomerado industrial chileno proveedor líder de servicios y productos a la minería e industria que opera en Norte América, Latinoamérica, Europa y Asia, y sus servicios y productos se comercializan en todo el mundo. Por lo demás no creo en un objetivo publicitario señalar la eliminación de importaciones pues lo verdaderamente importante sería conocer si, una vez eliminadas éstas, el costo para los consumidores locales será menor o se aplicará un precio de paridad de importación como en los combustibles; eso es lo verdaderamente importante, como lo es estimar cuanto se van a ahorrar nuestros agricultores por la entrada en vigencia del proyecto o no va a existir ningún ahorro.

Igual de obsoleto resulta el promover publicitariamente el concepto de “valor agregado”, sin que el mismo contemple una rigurosa evaluación económica y otra a costos sociales. El valor agregado económico es muy distinto al valor agregado del marketing.

Finalmente, el aviso concluye con una declaración en recuadro que dice “Estamos sólo a la espera de la suscripción del contrato de suministro de gas natural con Camisea para que este gran proyecto y sus beneficios se hagan realidad”. Este es el núcleo del problema. Sin embargo decir que están “a la espera de la suscripción”, omite de por sí cualquier negociación  futura pues da por sentado que ya hicieron todo por su parte y que la contraparte está obligada a suscribir sus pretensiones. Mal mensaje; pésimo mensaje si lo que se desea es forjar relaciones armoniosas y de largo plazo.

 









[1] http://www.larepublica.pe/27-04-2012/nitratos-del-peru-da-ultimatum-pluspetrol-por-gas-para-su-proyecto

miércoles, 23 de mayo de 2012

Casi, casi desapareció el subsidio al Gas Licuado de Petróleo (GLP)

El Informe “Factores de Aportación y/o Compensación” aprobado por la Dirección General de Hidrocarburos del Ministerio de Energía y Minas (DGH) y que rige para la semana del 22 al 28 de mayo 2012, determina la eliminación del subsidio al Gas Licuado de Petróleo (GLP) comercializado a granel y establece en apenas 0.04 PEN/Kg al dirigido a las actividades de envasado. Esto significa en la práctica que el GLP ha dejado de ser subsidiado, aunque no sabemos si temporalmente o para siempre.

La eliminación del subsidio se da al haberse calculado que el precio de paridad de exportación (PPE), que sirve como referencia para el pago de los subsidios, es de 1.87 PEN/Kg, mientras que en el mercado interno el precio de lista de Petroperú S.A. en la Planta Callao es de  1.92 PEN/Kg para el GLP que tiene como destino la utilización a granel y de 1.97 PEN/Kg para el llamado “producto diferenciado”. Observemos aquí que el límite superior de la banda de precios fijado por el gobierno es de 1.83 PEN/Kg para el destino envasado y de 1.92 para el que tiene como destino la venta a granel.

Algunos errores que se presentan actualmente en el manejo oficial de este subsidio son, entre otros, el que resulta irregular que la DGH apruebe bandas de precios distintas, ya sea que se trate de GLP para envasado o para granel. El producto es  el mismo y la simulación del PPE que hace el Osinergmin es igualmente la misma, independientemente del destino inicialmente declarado para el producto; Va contra el sentido común y sólo permite que Petroperú S.A. cobre un sobre precio en el caso de la venta a granel; injustificado desde todo punto de vista, incluso si aplicamos la ley de Pareto por lo reducido de sus volúmenes comercializados y por propiciar un mercado negro. Peor aún esta semana en que desde el 22 se ha retirado el subsidio al granel.
Un aspecto adicional es el hecho que la petrolera estatal venda con un precio mayor al del límite superior de la banda de precios en los casos de venta destino “producto diferenciado”. Esta venta, de acuerdo con el enredado sistema de precios que se viene aplicando al GLP, es la que se efectúa a aquellos compradores que realizan actividades de exploración y explotación de hidrocarburos y recursos minerales, el procesamiento de recursos hidrobiológicos y/o la fabricación de cemento, y que se encuentran identificados en el Registro de Hidrocarburos de OSINERGMIN como Consumidores Directos.

Estos compradores ya habían dejado de recibir subsidios pero, muy lejos de cobrárseles el límite superior de la banda de precios a granel se les aplica un precio superior en 0.05 PEN/Kg; es decir gracias al poco experto manejo de los precios y subsidios al GLP que han creado tres precios para un mismo combustible en el Perú, subsisten ahora compradores subsidiados (supuestamente sujetos a un sistema de regulación de precios) y no subsidiados (precio libre), junto con una venta a envasadoras que recibe un subsidio mínimo. ¡Puertas abiertas para la corrupción y el mercado negro!

El PPE del GLP (conforme se calcula en el Perú), se encuentra esta semana en el nivel más bajo del período 2011-2012 (que es el que he evaluado). Sólo en las últimas 52 semanas ha caído 28.9%. Por su lado, manteniendo el controvertido subsidio al GLP, el precio final del balón al público apenas si ha bajado 1.0% en el período abril 2011/abril 2012; de no mediar el sistema de subsidio los consumidores hubiéramos disfrutado de una baja de precios de aproximadamente 10.30 PEN/Balón de 10 Kg.
Me parece que la actual coyuntura es el momento adecuado para desarmar el poco técnico sistema de subsidios vigente, dejar el precio libre y sujeto a la oferta y demanda con la actuación de las autoridades de gobierno para corregir fallas de mercado. Lo peor sería hacer que nuevamente el GLP aporte al Fondo de Estabilización de Precios (un sobrecargo para los compradores) y no se trasladen las bajas de precio al consumidor. 




jueves, 17 de mayo de 2012

La promoción del GNV no pasa por desprestigiar el GLP vehicular

Encuentro en el diario local Expreso en los últimos días, una equivocada campaña contra el consumo del Gas Licuado de Petróleo (GLP), tratando de posicionar al Gas Natural Vehicular (GNV). Para ello se incurre en una serie de afirmaciones equivocadas y se utiliza a políticos para relevar sus comentarios poco técnicos.
En la edición del 14-05-2012 publican “Subsidio al GLP va contra masificación del GNV” y en la edición de hoy 17-05-2012 vuelven a la carga con similares argumentos para señalar que Las señales indican que el GLP es un combustible más barato y, al percibirse así, su consumo crece a diferencia del GNV, donde el Gobierno pone mayores exigencias”.
Decir como manifiesta el diario que “El Gobierno que lidera Ollanta Humala … mantiene un trato preferencial hacia el informal mercado del GLP…” contiene dos gruesos errores de apreciación :
1.1.   Decir que el GLP tiene un trato preferencial es no decirle la verdad al país. Este gobierno y los anteriores han sido los mayores publicistas del GNV, desmereciendo injustificadamente las bondades del GLP, meciendo al país con una supuesta futura llegada del gas natural a localidades a las que jamás llegará, convirtiendo en un circo el frontis del Ministerio de Energía y Minas con pancartas señalando lo barato que es el precio por galón de este combustible, sin aplicarle Impuesto Selectivo al Consumo desde el inicio de su comercialización hasta ahora, como si hacía con el GLP automotor hasta junio de 2005 y posteriormente lo reintrodujo erróneamente en diciembre de 2010; felizmente en una modificación de su error esta reintroducción sólo duró una semana, etc., etc.

1.2.    Señalar que el mercado del GLP es informal escapa a la verdad o es una grosera generalización. Todos los gasocentros que venden GLP automotor (al igual que los de GNV) se encuentran autorizados y supervisados por el OSINERGMIN que evalúo el cumplimiento de todas la normas técnicas, ambientales y de seguridad antes de otorgar los permisos de operación correspondientes. Por su parte ningún punto de venta de GLP automotor puede adquirir combustible si no registra previamente su orden de compra y obtiene un código de autorización del OSINERGMIN para cada compra. Ningún ofertante le puede vender GLP si no cuenta con este código de autorización. En el caso del GLP, por ejemplo, la refinería La Pampilla (productor) y Lima Gas S.A. (comercializadora) cotizan en la Bolsa de Valores de Lima y mantienen buenas prácticas de gobierno corporativo; entonces ¿Dónde está la informalidad?

Atribuye el diario al ex Ministro de Energía y Minas Ing. Carlos Herrera, cosa que pongo en duda, que “Cuando el GLP se utiliza en el sector transporte e industrial el subsidio al GLP va en contra de la masificación del gas natural y eso es lo que ha ocurrido en el Perú”.

El automovilista que utiliza GNV paga un precio regulado por contrato de Perupetro S.A. con Pluspetrol S.A. El que utiliza GLP se atiene a los precios del mercado internacional. Para mayor ventaja, los automovilistas con vehículos a GNV vienen gozando desde octubre de 2007 hasta setiembre de 2012 del no pago por el costo del combustible en boca de pozo pues, gracias al apoyo de Pluspetrol, reciben este precio promocional para incentivar la utilización de GNV. Sólo pagan el equivalente a la regalía con un descuento que equivale al 72.4% del costo que pagan los otros consumidores de gas natural no residencial. ¿Hay aquí trato preferencial al GLP?

El GNV se comercializa actualmente en Lima a 1.83 PEN/M3, equivalente aproximadamente a 3.30 PEN/Galón (de acuerdo al poder calorífico). El GLP Automotor lo hace en promedio a 1.48 PEN/Litro, equivalente a 5.60 PEN/GLN. Es decir, el GNV es 41.1% más barato que el GLP Automotor. Con este enorme diferencial de precios a favor del GNV ¿Puede ser competencia el GLP Automotor al punto de atentar contra la masificación del GNV? Por supuesto que no. Con este bajísimo precio que permite a los consumidores de GNV incluso pagar la adquisición de vehículos nuevos ¿De qué forma puede el GLP automotor atentar contra los iluminados planes de masificación?
Lo que sucede es que algunos siguen insistiendo en enfrentar ambos combustibles, tratando de “pisarle los callos” al otro sin reconocer la diversidad y amplitud de nuestro territorio y pensando que Lima es el Perú. Lo que necesitamos, insisto, es tener una cultura de gas que incorpore a los dos combustibles dentro de una política energética nacional realista, sin prejuicios ni paradigmas ni oscurantismo, ni amenazas de agotamiento del GLP nacional como se ha llegado a afirmar esgrimiendo el “cuco” de la posible importación.
No busquemos en inexistentes beneficios al GLP lo que debemos encontrar en las propias limitaciones de la comercialización del GNV, entre otras, una millonaria inversión económicamente válida sólo para los momentos de penetración en grandes mercados y aplicable en apenas algunos mercados volumétricamente significativos (no todos los mercados peruanos rentabilizan una inversión en gasocentros de GNV), una errática política de precios en punto de venta, falta de investigación técnica sobre los resultados de su utilización en nuestro país (Lima no es el Perú) y carencia de una representación gremial de primer nivel.

domingo, 13 de mayo de 2012

El mercado funciona: Caso Gasolina 98

Si algo se debe esperar en un mercado de libre competencia es que los precios se fijen por oferta y demanda. Los economistas tenemos presente aquí el modelo de la telaraña por el cual los agentes mueven sus precios sucesivamente alrededor de un nuevo ajuste de mercado. Si el mercado funciona, se llega a un nuevo precio de equilibrio. Nada está dicho sobre el tiempo que transcurre.

Superados los primeros días posteriores a la baja de precios de los productores de gasolinas de alto octanaje (98, 97 y 95 Octanos RON) un medio de prensa titula este 11-05-12 “Grifos bajan precios de los combustibles progresivamente en Lima”. Por supuesto que esta noticia no tiene rebote y a nadie le interesa destacar las bajas de precio en el punto final de la cadena de comercialización. Y así, estas bajas pasan desapercibidas para la opinión pública y quizá hasta para el mismo automovilista.

Para que no quede la impresión que sólo relevamos las alzas de precios, he efectuado un pequeño análisis de lo sucedido con la gasolina de 98 Octanos en esta última disminución de precios efectuada por los productores el 26-04-12. El Osinergmin, el INDECOPI o el Ministerio de Energía y Minas con más personal, tiempo y recursos económicos podrían efectuar análisis similares o superiores.

No es un consumo importante el que se hace de este producto, a pesar que contiene como máximo 50 ppm de Azufre (es la menos contaminante); apenas 32.2 miles de galones diarios (ene - mar 2012). Tampoco lo comercializa Petroperú S.A. Sin embargo hay una enorme competencia. En el caso de Lima se reportan en el Facilito de OSINERGMIN un total de 108 puntos de comercialización con una venta promedio diaria de 313 Galones, volumen que de seguro no sustentaría económicamente efectuar inversiones para su venta pues debe tenerse en cuenta que la compra mínima en Plantas de Venta sería para unos 3 días con máximos cuidados para su transporte más caro a fin de evitar la contaminación y/o adulteración.

La reacción en puntos de venta luego de la reducción de precio de los productores ha sido a la baja, disminuyendo el precio promedio en 0.81 Nuevos Soles/Galón ó 4.3%. Por supuesto que la baja no se ha dado al siguiente día de la reducción de los productores, como suelen reclamar quienes no conocen la naturaleza de un mercado de libre competencia y anhelan volver a la época de los precios regulados en Estaciones de Servicio, todos iguales, en las mismas fechas y con pésimo servicio resultante en estaciones obsoletas y con máquinas despachadoras listas para el deshuase.

Seis puntos de venta redujeron sus precios al día siguiente que lo hiciera el productor, con rebajas de hasta 1.00 Nuevo Sol/Galón; son Estaciones de Servicio que siguen políticas comerciales de precios mínimos y buscan, tanto mantener sus clientes, como ir ganando algunos nuevos atraídos por precios bajos y por ello no dejan pasar un solo día de promoción.

 Progresivamente, con cierto letargo pero avanzando, las condiciones de competencia y seguramente las mermas en ventas, determinaron que los puntos de venta se sigan incorporando a la masa de los que aplicaron la baja de precios. En total, 102 de los 108 puntos comercializadores bajaron sus precios entre el 27-04 y el 12-05-12. El 09/05/12 ya habían bajado el precio casi el 30%, momento decisivo, porque a partir del 10/05/12 se llegó a un 90.2% aplicando bajas de precios. Se tomó el mercado 14 días para alcanzar el 90.2% de puntos de venta con precios a la baja.

¿Sabe hoy cuántos precios distintos existen en las Estaciones de Servicio para la gasolina 98? Un total de cincuenta; ¡Para todos los gustos! Por lo demás siguen una distribución normal (Campana de Gauss).

¿Conoce Ud. la brecha entre el precio mínimo y el máximo? Llega a 4.14 Nuevos Soles/Galón.

El precio moda (el más frecuente) de 17.67 Nuevos Soles/Galón sólo rige para el 20.4 % de los puntos de venta.

Con todos estos datos no creo sea sostenible señalar que ha habido una concertación para no bajar los precios. Por supuesto que inicialmente hay cierta resistencia a aplicar de inmediato la baja, sobre todo cuando es significativa. Sin embargo el mercado funciona y logra, en este caso a los 14 días, bajar hacia un nuevo precio rebajado, que de seguro no será tampoco el final pues como repito la competencia es bastante dura.

Esto es independiente de la existencia de utilidades o pérdidas en los puntos de venta; la inversión está hecha para atender necesidades de un segmento de consumidores. El marketing mix de la estación, la oferta de servicios múltiples y las condiciones de seguridad, calidad y cantidad despachada ofrecen resultados que en muchos casos superan la de precios más bajos en el segmento más alto de los automovilistas.

Esto que sucede en la Gasolina 98 es algo que de seguro funciona también para otros productos derivados del petróleo y del gas, con diferentes matices y con una necesidad grande de mayor comprensión técnica a fin de mejorar la sensación de estafados que se nos quiere hacer que asumamos. No hay peor sanción para el que no sigue las reglas del mercado que la condena de sus consumidores. Más que la multa juega aquí la sanción del consumidor para cambiar de surtidor.




martes, 8 de mayo de 2012

¿Con descuento o sin descuento?

Con la llegada del Gas de Camisea se empezó en el Perú a comercializar el Gas Natural Vehicular (GNV). La estadística oficial señala que esto sucedió en octubre del año 2005.

Llegamos así al mes de agosto 2006 con un consumo acumulado de 3.7 millones de m3 y 3,194 vehículos convertidos, con apenas dos gasocentros operando y 3 en construcción, logros sumamente bajos cuando se tenía la decisión gubernamental de promover el consumo de este combustible.
Por este motivo y como  una medida promocional tendiente a incentivar la instalación de Estaciones de Servicio de GNV, Pluspetrol comunicó al Ministerio de Energía y Minas con carta del 06-09-2012 su decisión de rebajar a partir del 01-10-2006 el precio del GNV de 2.21 a 0.80 USD/MMBTU, descuento equivalente a 63.8% con el que se esperaba despegar el consumo y promover la inversión. La promoción se señaló tendría un lapso de seis años, tiempo más que suficiente como para que madurara el mercado.
Si tenemos en cuenta que la regalía promedio pagada por Pluspetrol en abril 2012 por las ventas de gas natural al mercado interno es de 0.66 USD/MMBTU, independientemente del monto cobrado por el GNV, rescataremos que en la práctica el operador no recibe nada por la venta promocional de GNV (y por lo tanto el Estado no recauda nada tampoco por Impuesto a la Renta).
El GNV resulta casi regalado por Pluspetrol S.A. y los gasocentros deben pagar sólo los gastos de transporte y distribución a Cálidda. Los automovilistas por su parte pagaron en promedio durante el mes de abril 2012 un precio en gasocentro de 0.96 PEN/M3. A fin de homogenizar la información podemos señalar que mientras Pluspetrol cobra 0.0763 PEN/M3 de GNV, paga una regalía de 0.0628 PEN/M3 y los automovilistas, en medio de una guerra de precios declarada pagan 0.9600 PEN/M3 en promedio, es decir un precio que resulta ser 10.1 veces más que el precio en boca de pozo.
A marzo del 2012 la campaña promocional de ventas de GNV ha acumulado 1,394 millones de m3, implicando un menor cobro en boca de pozo superior a los 70.2 millones de USD. Por su parte los vehículos a GNV alcanzaron las 132,193 unidades con 184 puntos de venta operando y 24 en construcción. En este nivel se llegará en septiembre 2012 al vencimiento del plazo promocional de precios congelados por 6 años para el GNV y podrán recuperar su precio de lista con lo que más o menos se triplicaría en boca de pozo, lo que no significa que el precio final se tenga que incrementar en similar porcentaje ya que como hemos anotado el gas en boca de pozo es el componente más bajo de la estructura de precios del GVN; el aumento en el precio al automovilista no excedería de un 14%, luego de 6 años de congelamiento, sin nada que objetar legalmente y sin que este incremento vaya a desincentivar el mercado de GNV.
Por su parte el presidente de Perupetro S.A., la máxima autoridad encargada de la supervisión de los contratos de gas, informó al diario La República (08-04-2012) “que el contrato con Pluspetrol tiene un año adicional y que el MEM se encuentra en plena evaluación sobre la renovación con la empresa” añadiendo que “aun cuando el precio se encuentra regulado, de haber un incremento sería de 5% anual como tope, y que si ese fuese el caso habría otros combustibles alternativos”; lamentablemente para el Presidente de Perupetro S.A. nada de esto es cierto y convendría se documente mejor a fin de no crear falsas expectativas.


Zas, zas, GNV a la mitad

Un sugestivo titular en la portada de un diario nacional (07-05-12), indica “GNV a la mitad”, marcando GNV[1] con tinta roja acompañado de foto de cilindro del producto para que no quede duda indicando que se trata de una “buena noticia para automovilistas” y con letra menuda que “Adelantan que combustible costaría un 50% menos en octubre”. Por supuesto que la letra menuda no la lee nadie y mucho menos el tiempo indicativo condicional “costaría” que en buen romance significa una acción hipotética. Sin embargo los lectores peruanos solemos interpretar el condicional como cierto y los escritores (como mala costumbre), lo usamos en ocasiones para salvaguardar nuestras espaldas ante la posibilidad de alguna querella judicial.
A partir de titulares como el descrito se desatan posteriormente una serie de comentarios en el mismo y otros medios, se entrevistan expertos para que den su opinión y muchos de ellos, sin mayor preparación, se animan a apoyar la hipótesis del Diario en el entendido que sus declaraciones serán recogidas y así se harán “famosos” aunque sus declaraciones sean generalistas. Y así el tema se va volviendo un paradigma que posteriormente resulta difícil de romper.
Los menos, tratamos de ser objetivos e investigar a pesar que los resultados sean una opinión discordante y menos populista aunque no exenta de caer en error involuntario, como humanos que somos.

Considero que el problema ha surgido en primer lugar por considerar que el gas natural (GN) es un commodity cuando en mi concepto económicamente no lo es. De ser commodity sería válido el análisis publicado por el diario que si el precio internacional baja, entonces el precio en el mercado interno debería bajar. De lo contrario está afirmación no es cierta.

La confusión se da desde que en los Estados Unidos (el mismo país que llama billion [1*109] a lo que nosotros ahora llamamos millardo para no confundirlo con nuestro castizo billón [1*1012]) han empezado a llamar así a los contratos a futuro haciendo que prácticamente todo sea un commodity[2]. Pero esto sólo es generado por una definición legal que tiene que ver con aspectos bursátiles que deben ser normados y que sin embargo no es lo que económicamente interesa y tiene relación vinculante, como sucedería en este caso con los precios internos del citado producto.

Tradicionalmente la definición de los commodities se ajustó al concepto de materia prima o comercialización a granel refiriéndose a productos cuyo valor estaba dado por el derecho que tiene el propietario del mismo a comercializarlo y no por el derecho a utilizarlo. Como ejemplo el petróleo que basándose en una calidad estándar mínima no hace diferenciación entre el petróleo producido en un país o en otro.

Con posterioridad esta definición se ajustó a aquellos productos que tienen elaboración, disponibilidad y demanda mundial, con un precio internacional y que no requieren de gran inversión o tecnología para su transporte. Por supuesto que aquí no se puede considerar al GN. Y es aquí donde lo que es válido para el petróleo crudo y sus derivados no lo es para la industria del gas. De difícil comprensión, pero así son las cosas; no son iguales los precios “comoditizados” del petróleo crudo y derivados, que los precios del GN que no son commodities.

La determinación del precio del GN en “Boca de Pozo” tiene enormes complejidades, sobre todo cuando de elaborar contratos de licencia se refiere, principalmente porque no existe un mercado global y en consecuencia, un precio de referencia internacional, como si ocurre con el petróleo. De esa manera no se puede definir al GN como un bien transable a nivel internacional con calidad de commodity, como si lo es el petróleo. Lo muy particular de la industria del GN hace que el nivel internacional de sus precios no tenga mucho que ver en las economías locales por la imposibilidad de importarlo desde lugares lejanos por los elevados costos de su transporte; o de exportarlos.

Los EEUU consumen el 21.7% de los consumos de GN del mundo[3]; toda su producción es consumida internamente cubriendo el 89.4% de sus necesidades; el saldo es cubierto por importaciones ya sea por gasoducto o en la modalidad de Gas Natural Licuado (GNL). Así sólo el 1.8% de su consumo es atendido mediante importaciones de GNL; nivel insignificante para categorizarse como commodity.

Vista la situación a nivel mundial, sólo el 9.4% del consumo de GN es efectuado como GNL, exportándose principalmente a Japón y Corea del Sur.

En resumen las exportaciones totales (gasoductos y GNL) cubren sólo el 30.8% del consumo mundial, cifra que el año 2000 fue de 26.3%. Como se ve, existe algún avance en la transacción comercial del GN pero aún es sumamente incipiente como para darle la categoría de commodity, esto porque el transporte de líquidos por ductos es aproximadamente 1/5 del costo del transporte de gas por ductos.

Otro factor discordante para no considerar al gas natural commodity es que las reservas probadas se concentran en unos pocos países; sólo entre la Federación Rusa, Qatar e Irán poseen el 53.3% de las mismas.

El mercado internacional del gas está compuesto por diversos mercados regionales por lo que no es posible hablar de un mercado globalizado. Las referencias de precios internacionales son precios locales referidos a mercados regionales específicos, tremendamente diferenciados, sin que existan ajustes de precios comunes.



[1] GNV = Gas Natural Vehicular
[2] “Any tangible good or product that is the subject of sale or barter” - Webster's New World Law Dictionary Copyright © 2010 by Wiley Publishing, Inc., Hoboken, New Jersey. Used by arrangement with John Wiley & Sons, Inc.
[3] BP Statistical Review of World Energy 2011

miércoles, 2 de mayo de 2012

Y el impuesto al GLP se hizo ley

Antes de ingresar a la segunda vuelta electoral el año 2011, el Partido Gana Perú convocó a un equipo técnico para que preparara los “Lineamientos Centrales de Política Económica y Social para un Gobierno de Concertación Nacional” que algunos han dado en llamar “Hoja de Ruta”. Este fue un compromiso suscrito por el ahora Presidente Constitucional de la República.
Los señalados lineamientos incorporaron en laPolítica Tributaria” una oferta categórica “No se crearán nuevos impuestos” confiados en la buena performance que viene registrando el fisco nacional. Igualmente en lo referente a “Políticas de Energía” señalaron “Disminución del precio del gas (Gas Licuado de Petróleo-GLP)”, sin ratificar que bajaría a 12 Nuevos Soles por balón de 10 kilogramos como habían ofrecido en campaña, tampoco negándolo pero con una clara determinación de bajar su precio, confiados seguramente en una sólida caja fiscal y en la práctica de otorgar subsidios que se viene dando en el Perú desde el año 2004.
Con enorme decepción los consumidores peruanos ven como ambas promesas han sido incumplidas.
Por una parte al publicarse el 13-04-12 la Ley N°29852 que crea el Sistema de Seguridad Energética en Hidrocarburos y el Fondo de Inclusión Social Energético el mismo que se financiará en parte con un impuesto simuladamente llamado “recargo al transporte por ductos de los productos líquidos derivados de hidrocarburos y líquidos de gas natural equivalente a US$1.00 por barril a los mencionados productos…será trasladado en los precios de los hidrocarburos líquidos” (Art. 4.2). De esta manera el consumidor de GLP pagará un impuesto equivalente a 0.37 nuevos Soles por balón de 10 Kgs (incluido el efecto IGV). Este impuesto empezará a ser aplicado en cuanto esté aprobado el Reglamento de la Ley, previsto para un plazo máximo de 60 días hábiles contados a partir de la publicación de la misma. Se estima un ingreso anual para el fisco superior a los 16.9 millones de USD anuales por este concepto.
En segundo lugar no se ha cumplido hasta la fecha con la promesa de bajar el precio del GLP sino que todo lo contrario, se ha impedido esta baja al haberse reducido el subsidio 2.84 PEN/Balón (un 38.1% menos) entre julio 2011 y abril 2012 pasando de 7.45 a 4.61 PEN/Balón de 10 Kgs (incluido IGV). Para complicar más aún esta desorientada política, a partir del pasado 26-04-2012 los consumidores de GLP a granel (gasocentros, redes domiciliarias, industrias y consumidores directos – restaurantes, chifas, etc.) deben comprar con un precio diferenciado en planta de ventas superior en 6.1% al que pagaban anteriormente. Peor aún cuando se comience a aplicar el impuesto al transporte por ducto.
Dos promesas incumplidas ¡Dos! que bien pudieron hacerse realidad si se hubiera puesto un poco más de talento en el manejo de un asunto tan delicado en el que hasta el momento sólo ha ganado el Fisco con menores desembolsos en subsidios y mayores ingresos por el impuesto sin que se registre ningún subsidio efectivo a los más pobres, sin metas concretas de atención a quienes cocinan aún con leña y generando inequidades como efecto perverso de la citada ley.