martes, 30 de abril de 2013

Cómo vender GLP a pérdida, pero estar bien con el Gobierno


Un secreto a voces entre todos los que nos dedicamos a la investigación en hidrocarburos es la pérdida económica que representa para Petroperú haber atendido el pedido gubernamental de convertirse en un mayor comprador de GLP para así, según los buenos deseos gubernamentales, bajar los precios al consumidor final. 

En octubre de 2011 el gobierno anunció que abarataría el precio del GLP a 29 ó 30 Nuevos Soles por balón de 10 Kgs tras la firma de un contrato entre Petroperú y Pluspetrol. El Presidente de la petrolera estatal declaró que “Nosotros esperamos comprar el 40% de la producción de GLP de Pluspetrol, y a eso vamos a llegar”  . La genial propuesta de Petroperú para abaratar el precio del GLP incluía el tener un buque contratado a exclusividad para “tener una garantía adecuada sobre toda la logística que se va a implementar”1. Sólo que el problema no se resuelve sólo contratando un almacenamiento flotante frente al Callao si por otro lado la Planta a la que debe descargar sigue siendo un cuello de botella.

Para el titular de Petroperú el margen de comercialización de S/. 13, incluido el flete, se vería reducido en S/. 5 ó S/. 6 con la compra de GLP a Pluspetrol, lo que abarataría el balón de gas a S/. 29 o S/. 30. En esta lógica, la petrolera estatal intervendría para corregir los “altos costos/márgenes” que habría en el mercado. Lo haría adquiriendo hasta 40% de la materia prima barata de Camisea para abastecer el mercado de GLP y estableciendo una cadena de distribución más eficiente y competitiva: “La reducción sustancial del precio, añadió Campodónico, se va a dar por la reducción del margen de distribución minorista, con la competencia que les hará Petroperú” 

Esta forma miope de afrontar el tema comercial por supuesto que estaba destinada al fracaso económico. Pruebas al canto; el precio promedio del balón de 10 Kgs de GLP al consumidor en Lima nunca bajó; todo lo contrario, durante el gobierno actual ha subido ya 1.03 Nuevos Soles ó 2.9% ; dicho en su equivalente en Dólares el alza ha sido de 8.7%.

Se calcula que Petroperú ha perdido 4.8 millones de USD durante el año 2012 (12.6 millones de Nuevos Soles), por esta operación en la que compró en promedio a 663.9 USD/TM y vendió a 646.2 USD/TM absorbiendo una pérdida promedio cercana a los 18 USD/TM, sin contar los gastos administrativos, generales y financieros de la operación.
Algunas características de esta operación comercial de resultados negativos han sido:
  1. Petroperú seleccionó por contratación directa a “Transportadora de Hidrocarburos del Perú S.A.C.” para brindar el servicio de almacenamiento y transporte de GLP mediante el buque gasero Santa Clara B pagando un monto de 382,320 USD mensuales incluido IGV. 
  2. Los informes sustentatorios de la contratación directa, aprobados por el entonces Gerente de Operaciones Comerciales, hoy Gerente General indican que se hace “A fin de cumplir con el incremento de participación en la comercialización de GLP en el mercado interno que ayude a la disminución del precio del balón de GLP al usuario final, según lo dispuesto por el Ministerio de Energía y Minas” en un caso o “El Ministerio de Energía y Minas (MEM) ha dispuesto que PETROPERU S.A., a partir de diciembre 2011 incremente su participación en la comercialización de GLP en el mercado interno, a fin de procurar la disminución del precio del balón de GLP al usuario final”. Se trata de una indeseable injerencia política, la que se sigue a pie juntillas, a pesar de ocasionar pérdidas a la empresa de todos los peruanos. Y aquí nadie dice nada; sencillamente porque no es su plata.
  3. En la práctica el citado buque cumple funciones de almacenamiento flotante en el Callao por el que se continúa pagando 12,744 USD diarios incluido IGV, situación que sin embargo no ha permitido superar problemas de desabastecimiento recientes por oleaje anómalo.

Petroperú ha cerrado en rojo el primer bimestre del año, registrando pérdidas acumuladas por 616 millones de Nuevos Soles. Considero que cualquier investigación y denuncia que contribuya a que no siga acumulando pérdidas debe ser realizada, así como rechazar la injerencia política que le es típica. Mal ejemplo para promesas actuales de mejores conductas en el futuro en las que sinceramente no confío.


NOTA ACLARATORIA: Petroperú informó  a la Bolsa de Valores de Lima el 30-04-2013 que había tenido utilidades de 80.0 millones de Nuevos Soles al Primer Bimestre 2013, modificando así comentario del diario Gestión sobre una pérdida de 616 millones de Nuevos Soles

jueves, 25 de abril de 2013

UNA VEZ MAS: EL MARGEN COMERCIAL BRUTO NO ES GANANCIA


Una vez más se escuchan en el mercado peruano voces de protesta, esta vez dirigidas contra los “abusivos” griferos a quienes acusan de tener ganancias de 65%, utilizándolos como argumento supuestamente convincente para una potencial intervención estatal mediante la adquisición de las estaciones de servicio Repsol para lograr precios justos[1].

A manera de ilustración presento al pie un cuadro con información calculada para el mes de marzo 2013. Pueden observar los precios en la planta de almacenamiento de Petroperú en el Callao incluyéndose todos los impuestos.

Desde la Planta de Almacenamiento los diferentes combustibles son conducidos hasta los puntos de venta (flete de por medio). Una vez en la estación de servicio el producto es descargado, almacenado, mantenido y despachado a los usuarios por surtidores. Para ello el operador o propietario de la estación de servicio debe incurrir en gastos de operación y mermas, gastos administrativos, generales y financieros incluido el costo de  transporte de la recaudación por empresas de seguridad hasta las instituciones financieras en que mantienen sus cuentas y el derivado del cumplimiento de las responsabilidades de seguridad y cuidado del medio ambiente así como los correspondientes seguros. Todo esto se hace contratando servicios, pagando energía eléctrica, teléfono y gastos de planilla para operar las 24 horas del día los 365 días del año.

Bueno, ninguno de los gastos señalados en el párrafo anterior es deducido al momento de calcularse el margen comercial bruto, porque es lo acostumbrado en la industria comparar el precio de venta en Planta con el precio al consumidor sin descontar los gastos. Pero, como es lógico comprender, esta no es la ganancia que obtiene el propietario de una estación de servicio y que tampoco toma en cuenta las inversiones en activos fijos y capital de trabajo.

Pero lo que es lógico para todos no lo es para contribuir a la confusión que provoca río revuelto.

En el cuadro siguiente he calculado los márgenes comerciales brutos vigentes en promedio ponderado durante el mes de marzo 2013 en las estaciones de servicio para gasoholes y Diesel. El promedio de este margen (que reitero no descuenta los gastos y costos) es de 11.0%. Observemos también que los márgenes son mayores en los productos de menor venta como es lógico y muy menores en casos como el del Diesel  en el que hay una gran demanda y enorme oferta; todas éstas son características del mercado de libre competencia.

En el supuesto negado que una estación de servicio ganara 65% como se denuncia y que esto equivale al margen comercial bruto tendríamos, por ejemplo, que un galón promedio de combustibles hubiera costado en marzo 2013 un promedio de 20.12 Nuevos Soles/Galón en lugar de 13.69 como realmente se ha dado.





[1] “Actualmente el margen de ganancia de los grifos es de 65 % y no desean regular los precios a favor de todos, entonces el Estado con la compra puede mejorar la competencia. ¿Por qué se tiene que seguir resguardando los beneficios económicos de los grandes grupos empresariales?”  http://www.rpp.com.pe/2013-04-25-lescano-con-compra-de-repsol-se-puede-regular-precios-de-combustibles-noticia_588734.html

Por favor alcancémosle la Constitución peruana


Frente al Foro Económico Mundial que se realiza en nuestro país, el Sr. Presidente Ollanta Humala señaló que el Perú había vivido “las influencias de las diferentes corrientes mundiales en torno al desarrollo” económico, habiendo pasado de una experiencia fuertemente pública en la década de los 70´s a otra que se ubica en el extremo opuesto que implica “la reducción del Estado a su mínima expresión”. Agregó a este cuestionamiento que venimos construyendo un Estado más equilibrado que ya aprendió de ambas experiencias.

He aquí un opaco análisis, por lo demás ya superado en el mundo desde cerca de 70 años e incorporado en nuestro país en las constituciones de 1979 (Art. 115°) y 1993 (Art. 58°) en que se establece que “La iniciativa privada es libre. Se ejerce en una economía social de mercado”.

Es precisamente esta economía social de mercado, cuyas características muchos desconocen, la que brinda el equilibrio denunciado por nuestro Presidente como una carencia. Los valores éticos en los cuales se fundamenta la economía social de mercado se centran en principios que guardan relación con el bien común, la dignidad humana, la solidaridad y el rol subsidiario del Estado con la finalidad de lograr un sistema económico al servicio del hombre. Este sistema adoptado por nuestro país y muchos otros del mundo se entiende como un sistema que asume una responsabilidad social y un modelo económico adaptado a los cambios sociales con márgenes y límites reglamentados según una agenda de valores y principios.

La Constitución peruana, que debería ser mostrada como modelo ante el mundo, es la que da responsabilidades al Estado para actuar “principalmente en las áreas de promoción del empleo, salud, educación, seguridad, servicios públicos e infraestructura”; suficientes responsabilidades ya como para empeñarnos en retomar otras vías que incluyan el retorno a un estatismo económico que casi todos rechazamos.

No es que se haya reducido al Estado a su “mínima expresión”. Decir esto implicaría que las enormes tareas de responsabilidad estatal no son importantes y quizá por ello veamos resultados tan desalentadores en  aquello que si le es exigible.

No olvidemos que es dentro del marco de la Constitución vigente que hemos crecido 5.4% anual promedio en términos reales durante su vigencia y reducido la pobreza de 42.4 a 27.8% entre el 2007 y el 2011.

domingo, 14 de abril de 2013

¿Debe Petroperú comprar La Pampilla? De suceder, Petroperú se convertiría en un monopolio de la refinación


El suplemento Portafolio del diario El Comercio, de Lima nos invitó a comentar en 2,800 caracteres nuestra posición sobre el particular. La versión impresa la pueden bajar en el siguiente vínculo:



El Art. 60° de la Constitución establece que sólo autorizado por ley expresa el Estado puede realizar subsidiariamente actividad empresarial. La Constitución anterior autorizaba al Estado a ejercer actividad empresarial con el fin de “promover la economía del país y alcanzar los objetivos de desarrollo”. La autorización terminó en 1993 con la nueva Constitución. A pesar de lo claro del mandato constitucional, no faltan quienes afirman que la autorización a Petroperú está dada por el Decreto Ley 17753 del año 1979, sin señalar que es anterior a la nueva Constitución. Para otros, la Ley 28840 del año 2006, llamada de fortalecimiento y modernización de Petroperú, es el sustento para que siga ejerciendo actividad empresarial no subsidiaria. Pero, ninguno de sus artículos, como no podría serlo, exonera a Petroperú para que abandone su rol subsidiario y entre a competir con los privados; lo único que hace es ampliar su objeto social para incluir actividades de petroquímica básica pero siempre manteniendo inalterable su rol subsidiario. La legalidad de la participación de Petroperú permanece circunscrita a cumplir un rol subsidiario, cosa que por lo demás descuida con flagrancia. Siendo así de claro, no hay autorización a Petroperú para que su propuesta pueda ser tomada legalmente en serio pues no le da seguridad jurídica al vendedor, así se expida una ley autoritativa pues esta figura es válida sólo para cumplir un rol subsidiario. Nadie garantiza que con posterioridad a la venta se cuestione una compra a todas luces ilegal.

Para Repsol la oferta de Petroperú podría ser evaluada sólo ante un desinterés de los postulantes privados convocados que le hagan revisar estratégicamente si es más conveniente que sea el Estado el que “cargue con el muerto” de una operación refinera que opera a 2/3 de su capacidad de carga y con compromisos de inversión estimados en 800 millones de USD para desulfurización que se transferirán al comprador. Peor aún, adquirir estaciones de servicio sin la marca Repsol ni sus estándares de servicio, sería un mal negocio. No es serio que se argumente a favor de un monopolio estatal refinero, que tendríamos asegurado el suministro y que los precios serían más bajos o que se insista en el carácter estratégico de la industria.

La vigencia durante 14 Años de la Constitución de 1979 y su modelo de participación empresarial del Estado nos trajo como consecuencia que las empresas estatales no financieras produjeran una pérdida de 39,286 millones de Soles y que el PBI del sector hidrocarburos disminuyera 4.8% anual promedio. A partir de la Constitución de 1993, la inversión privada bruta fija en el Perú ha crecido en 8.8% promedio anual en términos reales, mientras que con la Constitución anterior apenas si se incrementó en 0.6% promedio anual.