lunes, 25 de septiembre de 2006

ELECTRO UCAYALI o LA PERDIDA DE LA VISION SOLIDARIA

Con las disculpas de tocar esta semana un tema de electricidad en lugar de petróleo, pero la indignación lo vale.
El Peruano del 20/09/06 publica una Resolución Suprema por la que se otorga concesión definitiva a Electro Ucayali S.A. para desarrollar la actividad de distribución de energía eléctrica en la zona de concesión del Pequeño Sistema Eléctrico Campoverde, en el distrito del mismo nombre de la provincia de Coronel Portillo del departamento de Ucayali.

Campoverde es un hermoso lugar de nuestra amazonía, con gente muy progresista, organizada y trabajadora al que el 2003 logramos electrificar a través de la empresa pública regional. A pesar que no se encontraba dentro de nuestra área de concesión, un Directorio muy comprometido en la lucha contra la pobreza que me honré en presidir, acogió con gusto el reto de solicitar su concesión. Razones más de sensibilidad social que de interés económico eran las que nos animaban en el entendimiento que ésta es una visión básica de las empresas regionales de electricidad.

Por eso me llama la atención que la visión actual que coloca Electro Ucayali en su Web para el 2006 sea “Destacar por nuestra rentabilidad dentro del sector eléctrico en beneficio de la región y del país”. En nuestra gestión teníamos como visión “Ser reconocida por la excelente calidad de nuestros servicios y como gestores del desarrollo de la amazonía” (Memoria Año 2001).

Empresas similares como Electro Oriente tienen como visión “Ser reconocidos como empresa líder en el sector eléctrico nacional que contribuye al bienestar integral de la sociedad con un servicio eléctrico de calidad” y en el caso de Electro Puno “Empresa líder del sector eléctrico y de constante innovación tecnológica con capital humano de alto nivel que impulsa el desarrollo socio económico del país”. Como vemos, no está ausente de ninguna manera en la visión empresarial del Estado el bienestar de la población a la que se sirve con el servicio eléctrico. Pero en la concepción actual de Electro Ucayali al parecer se prioriza la rentabilidad.

Sin embargo, observando los principales resultados de su plan Estratégico 2004/2008 encontramos que su rentabilidad sobre patrimonio al IIdo trimestre del 2006 es negativa en 0.49%, mientras que el 2004 cerramos el ejercicio con un resultado positivo de 4.7%.

Igualmente llama la atención que se plantee un crecimiento de sólo 7.1% para la venta de energía eléctrica el 2006, cuando el 2002 logramos 11.6% y el año pasado se ha crecido 12.2%. ¿Esto es resultado de priorizar rentabilidad?

Otro tema que llama igualmente la atención es que pese a las normas de transparencia no se publique en este mismo informe electrónico los resultados ni del 205 ni del 2006 para la frecuencia de interrupciones de distribución (el 2004 crecieron 65% sobre el año 2004), la duración de las interrupciones (el 2004 crecieron 250% sobre el 2004). Y en lo referente a la calidad del alumbrado público, increíblemente han establecido como meta pasar de las 4 vías fuera de tolerancia logradas el 2003 a 5 el 2006 sin informar tampoco los resultados 2004, 2005, 2006. Y finalmente, en lo referente al grado de electrificación en su zona de influencia que incrementamos en 8.1 puntos entre el 2001 y el 2003, por lo contrario lo han disminuido 2.8 puntos a junio 2006 con relación al 2005. Y todo esto en medio de una enorme necesidad de electrificación en asentamientos humanos.

Otro error de concepción es el de señalar en sus objetivos estratégicos 2006 – 2010 aprobados por su Directorio en junio del presente año ampliar el número de clientes, pero “especialmente en media tensión … que se traduce en mayores ingresos”.

Recientemente, en marzo, FONAFE publicó un documento llamado “FONAFE no deja invertir ¿Mito o Realidad?” en el que, para pena de quienes aportamos esfuerzo para su rehabilitación, aparece en el ranking de peor ejecución de gastos de capital con el número uno, por haber ejecutado sólo el 0.4% del presupuesto autorizado por el FONAFE.

Adicionalmente una llamadita de alerta sobre su gerenciamiento. Mucho costó imponer conductas transparentes y por eso deberían explicar por qué el presente año, una misma empresa (Constructora CASAV EIRL), ha recibido tres adjudicaciones de menor cuantía para servicios de mantenimiento y reparación de pared del almacén central (03/02/06), mantenimiento de tejado de los ambientes del almacén central (17/04/06) y mantenimiento de las instalaciones eléctricas de los ambientes del almacén central (31/05/06), una típica figura de fraccionamiento de lo que debería ser una adjudicación directa selectiva
Igual me preocupa que en medio de tantísimos compromisos sociales incumplidos con la electrificación regional hayan gastado 500,000 S/. para adquirir un local usado y tengan aprobado gastar otros 419,904 S/. para las reformas y adecuaciones necesarias. Cerca de un millón de nuevos soles (308MUS$), oleados y sacramentados por el SNIP con el código 20101s, precisamente en una era de declarada austeridad promovida desde la Presidencia de la República, cuando lo más adecuado sería potenciar las redes de cobranza y evitar más bien que los usuarios tengan que acudir al local comercial.





viernes, 22 de septiembre de 2006

¿Y MAÑANA CUANDO VUELVA A SUBIR EL PRECIO DE LA GASOLINA?

Se nota un tanto exagerada la búsqueda de Estaciones de Servicio que no han bajado los precios de las gasolinas y el Diesel 2 al público emprendida desde muy temprano por el Sr. Ministro de Energía y Minas.
Según informa se ha decidido que las refinerías no aporten al Fondo de Compensación sino que bajen sus precios al público y nuevamente, con renovados bríos se convoca a la prensa, a los consumidores, al ama de casa y a Sarita Colonia para chequear a los que no bajen sus precios (seguramente con la tesis que son unos abusivos).

Y ya con mayor desorientación (Diario Correo), se declara que "... coordinará con la Dirección General de Hidrocarburos (DGH), para establecer sanciones contra los propietarios de los grifos de todo el país que incumplan con la reducción de los precios de los combustibles...".

El mercado se rige por oferta y demanda. Si un grifero no baja sus precios y otros si lo hacen, será el mercado el que lo sancionará, de ser el
caso. Si los griferos suben de inmediato cuando se incrementa el precio es lógica comercial pues el productor (así sea el estatal), sube sin
aviso previo y de inmediato tiene que disponer de mayor capital de trabajo para comprar el mismo volumen y no por ser un abusivo. Pura lógica comercial. Sino entonces porque no sancionar a las refinerías que tuvieron sus precios varios días por encima de franja hasta posteriomente bajar.

Tampoco se puede decir que los puntos de venta bajarán en equis soles e y centavos pues no son negocios del Estado ni son Grifos de propiedad de Petroperú (que igualmente es una empresa que opera y debe operar como privada), sino de privados. ¿Porque no chequear por ejemplo a los grifos de la Petrored (afiliados a la estatal Petroperú), a ver si dieron el ejemplo bajando y no hacerlo ante la televisión en una estación de Servicio Primax (Grupo Romero de Perú y ENAP de Chile).

Con esto se sienta un mal precedente y una desazón innecesaria. Que cada uno cumpla su rol (Y la DGH no tiene como función sancionar ni hay delito que sepamos), y que cada quien no incursione en el de otro y se respete la propiedad e iniciativa privada es una buena receta para
calmar apetitos de precaria notoriedad. Finalmente el mercado pondrá la coyuntura en otro momento para subir precios y ahí seguramente no se tendrá ánimo para convocar a la prensa.



lunes, 18 de septiembre de 2006

EL EFECTO PARAGUAS DE CESAR GUTIERREZ EN PETROPERU

La Junta de Accionistas de Petroperú, aquella que nos representa a todos los peruanos propietarios de la empresa petrolera estatal, y que preside el Ministro de Energía y Minas Arq. Juan Valdivia, designó el 23 de agosto pasado al nuevo Directorio de Petroperú S.A. Este Directorio es presidido a su vez por el Ing. César Gutiérrez Peña.

El gobierno de Alejandro Toledo (que deberá cargar con el pasivo de su manejo personalista de la primera empresa estatal peruana y que tanto daño le hizo), designó seis Presidentes de Directorio en sus 60 meses de vigencia (un promedio desalmado de uno cada 10 meses), de los cuales sólo el primero había tenido experiencia en su manejo administrativo (posteriormente fue denunciado por la Contraloría General de la República por haber cedido a la presión presidencial de Toledo para que destine más de cinco millones de nuevos soles en remodelar Palacio de Gobierno, incluidas las compras de alfombras, equipos de aire acondicionado y equipamiento del gimnasio, decoraciones y jardines. Fue cambiado en abril del 2002 con ocho meses de gestión). Los otros cinco fueron ajenos a la problemática de la industria petrolera, sin experiencia en tan delicado asunto estatal y desconocidos por la opinión pública. Fueron fáciles presas de la tentación burocrática vigente en la empresa, enviaron a sus mejores cuadros a sus casas y los reemplazaron por improvisados, creando además la cultura del miedo y el dejar hacer, dejar pasar que aún ahora impera entre los más antiguos sobrevivientes de la razia.

Presidentes contratados por el FONAFE para desempeñar el cargo de Presidente y designados por este Fondo, finalmente abjuraban de su patrono para buscar, quizá con buenos propósitos pero sin experiencia y con pésima asesoría interna, lo que creían era lo mejor para la Empresa llenándola de propuestas jaladas de los cabellos como comprar buques y camiones tanque o tirando abajo su imagen empresarial y cambiando hasta lo más esencial de su origen como lo es el huacal y la piedra de los doce ángulos de su isotipo.

O llevándola a participar en una red de estaciones de servicio que no le aportan absolutamente nada y a la que no puede atender como lo exige este tipo de negocios en los que cadenas tan importantes como las de Texaco, Shell y Mobil han tenido que abandonar el mercado. Igualmente olvidándose del mercado del GLP que era señalado en voz alta como una buena oportunidad de negocio y en la que ahora no pueden atender a sus propios clientes privándolos del crecimiento importante del mercado. O manteniendo la injusta política de precios que castiga a los pobladores de la amazonía y de los más remotos lugares o incrementando tanto el precio del Kerosene para que hoy el consumo de combustibles sólidos haya crecido en forma alarmante. E igualmente manteniendo una elevada exportación de gasolinas en lugar de promover su venta en el mercado interno de mayor beneficio. Estas son sólo algunas de las labores comerciales que le corresponden a una empresa estatal y no otras.

Buscaron en algunos casos el lobby legislativo para rodearse de caparazones sacando a relucir el cuco de la “competencia”, sin aportar nada al crecimiento, sin inversiones en su potenciación y sin un horizonte claro, sin planeamiento ni siquiera un pronóstico de ventas de largo alcance ni un balance volumétrico ni siquiera un modesto FODA bien hecho y mucho menos un Balance Store Card. Continuaron con la vieja tesis de ser los más grandes aportantes a los recursos tributarios del Estado y que eso significaba ser la primera empresa mientras que por otro lado iban perdiendo presencia en las bocas de salida, empeñados en una indefinición de su verdadero rol y en la no comprensión tampoco que la integración vertical no significa sólo hacerlo todo por si mismo sino tendiendo puentes y gestando alianzas. De esa manera sólo podrían acercársele interesados en los negocitos pero no empresas serias y de trascendencia.

A pesar de todo, quienes en algún momento tuvimos el honor de pasar por Petroperú, mantenemos la esperanza que las cosas puedan cambiar porque Dios es peruano y bien peruano. César Gutiérrez no es ningún ajeno a los temas de energía y tiene una bien ganada imagen de conocimiento técnico así como facilidad de comunicador y dialogante. Ha estado presente en muchas ocasiones, tratando de imponer ponderación y buen juicio cuando las calenturas políticas tenían sesgos populistas. Conociéndolo, entiendo que su aceptación para presidir PETROPERU es una entrega meritoria por los intereses del país y porque impere la cordura y las buenas prácticas comerciales. El encargo recibido está en el orden de hacer de PETROPERU una empresa de primer nivel, potenciándola y poniéndola al servicio de todos los peruanos. Tarea difícil, sobre todo si continúa con los mismos cuadros administrativos que la retacearon, la privatizaron, la adormecieron y la solapearon y si no ataca frontalmente todas sus taras. La tarea es ardua y urgente.

Es de esperar pues que la imagen de César Gutiérrez tenga el efecto paraguas que necesita PETROPERU. Por lo pronto, muchos ven como yo confianza en su gestión y no dejan de llegar las denuncias sobre todo lo malo que se hizo y sugerencias para superar los problemas. Bonificado con su amistad y su reiterada confianza no dejaré de señalar desaciertos y aplaudir éxitos como nos corresponde a todos.




lunes, 11 de septiembre de 2006

GLP PERUANO: TRAS EL GOLPE DE TIMON, EL PISTONEO

Algunos factores que impulsan a los gobernantes a proponer limitar el crecimiento de las ventas de GLP para uso automotor son:

  1. La vigencia de subsidios indiscriminados que benefician indirectamente a los automovilistas cuando se quiere beneficiar sólo al GLP para cocción de alimentos.
  2. La poca producción nacional de GLP que obliga a mayores importaciones con precios externos al alza pero obligados a mantener el subsidio en el mercado interno.
  3. La carencia de GLP en el país, incluso si tienen Gas Natural pero pobre en líquidos.
  4. Falta de capacidad de almacenamiento en el territorio nacional para la mayor demanda.
  5. Interés por exportar GLP no consumido en la medida que pudiera generar mayores ingresos a los productores/Estado.
  6. Disponer de GLP para la demanda petroquímica que se supone más de avanzada que vender materias primas.
  7. Imposibilidad temporal de aplicar un impuesto especial al uso automotor del GLP como una manera de compensar la merma en la recaudación de impuestos a la venta de gasolina reemplazada. En el Perú por ejemplo un galón de gasolina 90 paga casi 6 nuevos soles de impuestos y el GLP vehicular sólo uno.
  8. Sensación que los gasocentros están ganando mucho dinero en la venta de GLP, comparándolos erróneamente con el sector envasador que más bien se encuentra en crisis de rentabilidad.
  9. La vigencia de precios internos por debajo de la paridad de importación que dificulta la importación, “amorfinando” al consumidor local y generando mercados paralelos y cuotas de atención.
  10. No han estudiado bien la economía (no sólo el precio), de los combustibles alternativos, ni lo que significa un cambio real de matriz energética, ni han definido tampoco un horizonte de planeamiento de por lo menos 10 años aplicando más bien una conducta corto placista.

Tenemos aquí un decálogo de motivaciones, algunas economicistas, otras de tentación populista, algunas de políticas erradas y cada vez más onerosas y las muchas de carencia de confianza en el mercado y en la iniciativa privada para resolver sus problemas en forma autónoma.

La tentación controlista siempre presente en nuestros gobernantes es ya un defecto de nacimiento, forma parte de nuestra “indiosincracia”. Se propone así, que la empresa estatal invierta en abrir puntos de venta de GNV, se indica que va a haber escasez de GLP y que el precio va a subir. Se invita a invertir en GNV pero se desalienta al inversionista de GLP por supuestamente ganar mucho. Importamos crudo, diesel 2 y gasolinas y seguramente lo seguiremos haciendo por muchos años más, pero se llama al susto porque en algunos meses se podría necesitar importar GLP y en pequeñas cantidades.

Se ha vuelto a insistir en la política de desaliento al GLP para uso automotor y no se explica que haremos posteriormente cuando casi dupliquemos su producción. Se dan ultimátums a concesionarios y muchas más declaraciones en diferentes niveles y cual más desorientadora sin respetarse tampoco, y esto es lo más grave, los derechos de los consumidores que optaron por invertir en la conversión a GLP sin apoyo estatal.

Si no desea el Estado que se importe GLP para vehículos y desconfía de la iniciativa privada, por que no pone atención también en las gasolinas (combustible sustituto) en la que somos excedentarios. En la medida que todos los vehículos convertidos son duales, es decir tienen aún la posibilidad de consumir gasolinas y que más tarde que temprano dejarán de pagar impuestos por conversión vehicular, ¿por qué no bajar temporalmente vía precio/impuestos la venta de gasolinas sin plomo para que compitan en el mercado? Sólo la gasolina 90 ha bajado sus ventas tres millones de galones entre marzo y julio del presente año en comparación con el mismo período del 2005. Esta y/u otras medidas deben resultar de un análisis desprejuiciado que evite el molesto pistoneo de las declaraciones apresuradas de nuestros gobernantes y que demuestran poco afinamiento para resolver problemas.





martes, 5 de septiembre de 2006

Consumo y usos del GLP



Entrevista a Sergio Bandeira (SINDIGAS) y César Bedón (AGLPP)
Rumbo Economico Canal N
05-09-2006

lunes, 4 de septiembre de 2006

¿Y ahora nos pedirán que desincentivemos el GNV?

Cuando aún teníamos fresco un intento felizmente frustrado por imponer desincentivos vía tributación para disminuir la venta de GLP automotor, esta vez es el GNV (Gas Natural Vehicular), el que ocupa la atención por las inmensas colas que se agudizaron esta semana al paralizarse el despacho (por fallas técnicas), de uno de los dos únicos puntos de venta que existen actualmente en Lima.
Reclamos de los favorecidos con los créditos para la conversión de sus unidades (taxis, principalmente), por la demora en atención en condiciones normales y ahora exacerbada por una única fuente de suministro, la poca autonomía resultante que los obliga a cargar GNV y perder tiempo 2 ó 3 veces al día, el tamaño de los tanques instalados, la costumbre de nuestros transportistas de cargar 3 o 5 nuevos soles a cada momento y que ahora no es posible efectuar, la mayor demora de despacho y su negativa a operar como autos duales con la gasolina 90 que cuesta el doble, son definitivamente una mala publicidad para la promocionada conversión y los afectados reclaman que “se construyan más gasocentros”, como si fuera así de fácil resolver el problema y hasta hablan de “acabar con el monopolio”.De parte de los talleres de conversión, estos también piden que ya no se autoricen más pues con los 23 actuales consideran que se ha cubierto ya la oferta máxima posible.
Vale en este caso, una pequeña aritmética. La Cámara Peruana del Gas Natural Vehicular ha informado que al mes de julio 2006 un total de 1,831 vehículos habían sido convertidos a GNV, lo cual implica una media de atención de 916 vehículos por gasocentro. La autonomía de viaje para una unidad con un cilindro de 16 m3 es entre 120 y 140 Km en ciudad (según la misma Cámara).

Si tenemos en cuenta que se estima un promedio conservador de 450 km recorridos diariamente por un taxista (considerando que sólo trabaje 12 horas), tenemos que deberán acudir a recargar sus unidades como mínimo tres veces al día al gasocentro. Es decir que cada gasocentro tendrá que efectuar cerca de 3,000 despachos a carga llena diarios. Esto implica 12,000 minutos como mínimo para cargarlos (tiempo record de 4 minutos por unidad debiendo tener en cuenta además que el GNV requiere llenado lento para introducir más GNV al tanque que con llenado rápido [1]), y si consideramos que el día tiene 1,440 minutos, aritmética pura, se requieren 8 mangueras por gasocentro operando permanentemente durante las 24 horas del día. En la medida que esta enorme oferta de mangueras no se cumple por razones de inversión y costos operativos, concurrencia simultánea y limitaciones de espacio ya podemos suponer el tremendo problema que se arma operativamente para brindar un servicio con un mínimo de calidad.

La respuesta urgente técnico económica y no política a las preguntas y la atención de los reclamos corresponde al Ministerio de Energía y Minas, impulsor de las conversiones, el financiamiento y hasta del famoso microchip inteligente y quizá hasta de los 500 vehículos de la PCM que esperan el resultado de la licitación para su conversión a GNV. Esta información no se dio oportunamente al mercado y sólo presentó la cara bonita del menor precio y del cambie ahora pague después. Esperemos que esta respuesta surja rápida, conocedora del problema y no cortoplacista reconociendo de una vez por todas que el GNV no compite con el GLP sino que son productos concurrentes en los que incluso éste último tiene mayores ventajas como ahora aparece más claramente.

[1] Un llenado lento introduce más gas al tanque que un llenado rápido. El motivo de esto es que a medida que el gas aumenta la presión en el tanque, está en efecto comprimiendo el gas que ya está ahí - y esto provoca un aumento de temperatura, lo que a su vez reduce la densidad del gas.