Confieso que le sigo dando vueltas a como poder traducir, a la luz de la ciencia económica, pero con palabras sencillas, lo que nuestro Ministro de Energía y Minas dijo al presentarse ante el pleno del Congreso de la República el 6 del presente. En dicha ocasión afirmó como un hecho tangible que “El Perú pierde unos 220 millones de dólares al año al no aprovechar el etano que contiene el gas de Camisea y que, pese a llegar a la costa, se quema allí desperdiciándose el recurso, lo que significa que desde 2004 a la fecha el país ya perdió US$ 1700 millones”(1) . Agregó que “Hoy traemos el gas natural hasta Chilca en la costa, que tiene un alto contenido de etano, 10% según los reportes. Sin embargo, allí se quema 100 millones de pies cúbicos diarios de etano, que equivale a 600 mil dólares diarios.”
En cualquier clase de economía básica se enseña un término fundamental denominado “Coste de Oportunidad”, que básicamente se refiere a aquello de lo que una persona se priva o renuncia cuando hace una elección o toma una decisión. Supongo que a esto se ha querido referir el Sr. Ministro, o quienes lo asesoran. Es decir que, por no haber tenido una planta separadora de Etano, este importante combustible se quema junto con el Metano y por eso la pérdida pues, si lo tuviéramos separado, este tendría un mejor precio.
Aún así, todavía la explicación no es clara. Y me temo que no llegue a serlo, a pesar del enorme rebote que tiene en medios una declaración de este tipo.
El viejo texto “Curso de Economía Moderna” (1967) de Paul A. Samuelson, con el que nos hemos formado la mayor parte de los economistas de Latinoamérica y quizá del mundo, señala “Para los economistas, algunos de los costes más importantes que se derivan de hacer una cosa en lugar de otra son las oportunidades que se han perdido al dedicarse a esa actividad y prescindir de otras”. Samuelson da como ejemplo a Robinson Crusoe “Aunque no paga dinero a nadie, el coste de recoger frambuesas puede interpretarse como la cantidad de fresas que ha invertido en la búsqueda de frambuesas”.
Pero, Robinson Crusoe tenía a la mano fresas y frambuesas, y podía optar por recoger unas u otras en su labor diaria; esto no es lo que sucede con el Etano y Metano que conforman mayoritariamente el gas natural. Sólo tenemos gas natural (90% Metano y 10% Etano); y no lo tenemos separado.
Por eso que hacer cálculos de supuestas “pérdidas” que alcanzarían los 1,700 (un mil setecientos) millones de USD en los últimos ocho años por haber quemado Etano junto con el Metano, no me parece un análisis acertado. No es un cálculo económico, por decir lo mínimo. Supongo que lo que se quiere es llamar la atención acerca de cuan ignorantes somos los peruanos como para perder tanto dinero a lo largo del tiempo y no hacer nada, y así apurar a los Srs. Congresistas para que aprueben un proyecto de Ley que se les ha remitido con carácter de urgente y que no cuenta siquiera con un perfil económico.
Pero, vayamos un poco más allá.
El cálculo presentado al Congreso es burdo porque:
- Parte erróneamente de considerar que “el gas extraído en Camisea está llegando a volúmenes de casi 1,600 millones de pies cúbicos por día (2), conforme señala el Vice Ministro de Energía . De acuerdo con información de Perupetro S.A., la producción fiscalizada promedio en la Selva durante el período enero/agosto 2012 fue de 1,139 millones de pies cúbicos por día. Es decir, la información ministerial señala un 40.5% más que la producción fiscalizada. Esta producción es la que verdaderamente contaría para los cálculos oficiales en tanto la ampliación del ducto de TGP continúe paralizada. Es decir, podemos extraer en Camisea pero al no poder transportar a Pisco se tiene que reinyectar.
- Peor aún, la aritmética ministerial extiende su cálculo para el período 2004-2012, asumiendo igualmente que la disponibilidad de gas natural ha sido siempre de 1,600 millones de pies cúbicos diarios. La información correcta es que en este lapso la producción promedio ha sido de 423 millones de pies cúbicos diarios. Es decir, se hacen cálculos tremendistas, considerando casi 4 veces la producción real puesta a disposición.
- Se omite señalar que retirar 6% del volumen de Etano del gas natural implica, como es lógico, tener que compensar dicho volumen a través de una mayor demanda de gas natural. Es decir, necesitamos más volumen de gas natural para atender la misma demanda volumétrica de los clientes actuales. Y esto aplica para todos los consumidores ya sea en la cocina doméstica, en la industria, en la generación eléctrica o en el GNV. Si con el volumen actual disponible no se puede atender todos los requerimientos nacionales, veamos qué pasará cuando tengamos menos volumen.
- Pero, un factor que tampoco considera el cálculo ministerial es que el Etano tiene 76.4% más poder calorífico que el Metano (3) . Las compras de gas natural, así como el diseño de las tuberías, se hacen en función al poder calorífico que éste contiene. De esta manera los consumidores actuales tendrán que comprar más volumen para conseguir el mismo poder calorífico que antes de retirarle el Etano. De acuerdo con mis cálculos, que espero corrija el MINEM, los consumidores tendrán que comprar 4.5% más volumen de gas natural (4% de Etano), para conseguir el mismo poder calorífico que cuando lo adquirían con 10% de Etano. En otras palabras, el precio subiría 4.5%, lo que implica un mayor egreso de 59.9 millones de USD anuales (a precios actuales del gas natural de 2.97 USD/MMBTU y un volumen de 1,139 millones de pies cúbicos diarios).
- El Etano tiene un mayor octanaje que la gasolina; es por ello que se le puede utilizar en mezcla con la gasolina para elevar su octanaje. Uno de los usos del gas natural en el Perú viene dado por su aplicación como gas natural vehicular (GNV), el mismo que sería afectado con un menor octanaje que el actualmente ofrecido. O sea, como consecuencia del retiro del Etano habrá un mayor precio pagado y un menor octanaje recibido. ¿Cálculos?
- Agreguemos que, como resulta obvio, el precio del gas natural, que no es un commodity, es bonificado según el contenido de Etano que contenga; aritmética simple. Si el comprador recibe gas natural rico en Etano, pagará un mejor precio que si no lo es. Si se reduce el contenido de Etano, el precio de exportación recibido será menor, las regalías menores y el impuesto a la renta igualmente menor.
- Pero, lo más grosero de los supuestos ahorros calculados por el Ministerio de Energía y Minas y manifestados ante el Congreso, es el no decir que para no perder los 220 millones de USD anuales que señalan, debemos efectuar multi millonarias inversiones, calculadas inicialmente en 10,000 millones de USD para construir el polo petroquímico (que incluye la planta separadora de Etano en Pisco, más el ducto desde Pisco a Ilo o Matarani y la planta petroquímica de Etano).
Para un análisis serio tengamos en cuenta que no hay pérdida sobre algo que no existe; ni contable, ni económica; lo demás suena a cuento.
[1] Nota
de Prensa N°NP. 402-12 del MINEM (06-09-2012) http://www.minem.gob.pe/descripcion.php?idSector=5&idTitular=5013
[2] Nota de Prensa
N°NP. 380-12 del MINEM (19-08-2012) http://www.minem.gob.pe/descripcion.php?idSector=5&idTitular=4980
[3]
Metano=9,024 Kcal/m3; Etano= 15,916 Kcal/m3 – Fuente: FISICANET http://www.fisicanet.com.ar/energias/gases/en01_gas_natural.php
2 comentarios:
Estimado César, un comentario sobre el punto 4 del artículo:
Cierto que se requeriría más volumen de GN con 4% de etano para un mismo propósito energético (una verdad tanto en la cocina domiciliaria, como en las turbinas de gas de generación eléctrica). Pero, al tener el "nuevo" GN menos MMBTU/m3, tendría que negociarse su precio y ser más barato. Entonces, es cierto que los usuarios comprarían más volumen de GN para un propósito similar, pero debieran pagar aproximadamente lo mismo que pagaban con el GN conteniendo 10% de etano.
El problema, como Ud. bien lo menciona, es que esa demanda adicional de volumen de GN (m3), es un requerimiento adicional a la capacidad de transporte de TGP, que podría no ser soportada.
Es un buen artículo, lo felicito.
Saludos,
Carlos Q.
En efecto tiene usted razón en el caso de los consumidores nacionales que podrían resultar pagando iguales montos por la energía comprada. Pero, esto aplicaría sólo para el combustible en boca de pozo que tiene un precio en USD/millón de BTU´s.
En el caso del transporte red principal y distribución las tarifas son en Nuevos Soles por m3.
Finalmente, los puntos de venta, no creo hagan disquisiciones sobre los componentes del producto y podrían subir, teniendo en cuenta además que tendrían mayores costos en almacenamiento y capital de trabajo.
Muchas gracias por su interés
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